Miguel Angel Perera Díaz nació en Puebla del Prior (Badajoz), el 27 de Noviembre de 1983 y es el mayor de tres hermanos. Hasta los 9 años cursó sus primeros estudios en el Colegio de su Pueblo y a los 10 años pasó al Colegio San José, de Villafranca de los Barros (Badajoz), perteneciente a los Jesuitas. En esa etapa del Colegio San José conoce al hijo del ganadero José Luis Pereda, con el que mantiene una estrecha relación de amistad, y uno de los “culpables” de sus primeros contactos con el mundo de los toros.
Pero su afición es más incipiente. Nace cuando de muy pequeño jugaba al toro con sus hermanos, en el patio de su casa. Para desarrollar el juego utilizaba una camisa de su padre y un palo de billar de juguete que colocaba entre las mangas, a modo de estaquillador, para dar forma a su particular muleta. Además, el negocio familiar le ha mantenido siempre en contacto con el campo y junto a su hermano Sergio, enseñó a topar a un carnero para después intentar torearlo con un saco de pienso. Este juego de niños era su mayor diversión y a la vez el inicio de lo que más adelante sería algo serio.
Viendo cómo se divertían Miguel Ángel y su hermano con el carnero, su padre les regaló un becerro bravo. Construyeron una muleta de fabricación casera y con ella toreaban al pequeño animal en el corral que utilizaban para embarcar los animales de la empresa de ganado manso que posee la familia.
En el colegio san José de Villafranca se rodea de un grupo de amigos, además de José Luis Pereda, amantes del campo, los caballos y el toro. Aquella pandilla de amigos decidió un día organizar una capea con motivo de las fiestas del colegio. Para la ocasión se embarcaron dos becerras de la ganadería de José Luis Pereda y antes de que sirvieran para la diversión de todos los alumnos, Miguel Ángel dio en solitario sus primeros lances. Entre los asistentes estaba Baltasar Manzano, profesor de Deporte del Colegio, promotor de la fiesta, buen aficionado y por aquel entonces Presidente de la Peña Taurina El Albero. Al terminar de torear, Baltasar Manzano se acercó al jovencísimo torero y le preguntó que donde estaba su padre. Se dirigió al progenitor y le aconsejó que lo llevara a la Escuela Taurina de Badajoz. Esto sucedió en mayo de 1999, cuando Miguel Ángel entra a formar parte de la Escuela que dirige el matador de toros retirado Luis Reina.
En Agosto de ese mismo año, sin apenas haber toreado vacas, debuta en público, en Baños de Montemayor (Cáceres) y a partir de ese momento, durante las temporadas 2000 y 2001 torea un total de 22 novilladas con la Escuela Taurina de Badajoz. En Noviembre de 2001 se hace cargo de su carrera la empresa mexicana Tauromex, instalándose en Madrid para llevar a cabo su preparación de cara al debut con picadores, que tiene lugar en San Sebastián, el 23 de febrero de 2002. Ese año toreó 22 novilladas en España y 7 en América, en lo que supuso el inicio de su carrera.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario